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(Otoño 1999)
el esc
é
ptico
Desde el sillón
Ambos libros terminan con
una carta -en versión reducida
en Hablando con fantasmas- que
el doctor Jerónimo Estrany di-
rige a Comas Solà, quien dice
tener la “verdadera satisfacción
de publicarla” y en la que “res-
plandece noble y rigorista espí-
ritu científico”, a pesar de dife-
rir en algunos puntos de la opi-
nión del astrónomo; espíritu es-
céptico, en definitiva, y curiosa
coincidencia. Dos libros reco-
mendables, uno por exponer de
forma sintética la historia y he-
chos en torno al espiritismo, y
el otro por ser un testigo curioso
y casi de coleccionista escéptico
de una de las primeras posturas
críticas en España.
EDUARDO ZOTES SARMIENTO
¿Aristóteles
estaba
equivocado?
D
icen que el hombre se dife-
rencia del resto de los seres
vivos por ser un “animal poseedor
de razón o logos”. Debería dedu-
cirse de tan escueta definición
que cada una de nuestras accio-
nes personales se desarrolla con-
forme a un método, a un razona-
miento lógico. La realidad, como
todos sabemos, es muy distinta.
Nadie duda de que muchos de
nuestros actos no son puramente
racionales: al contemplar un cua-
dro o una puesta de sol, tenemos
emociones que no siguen las mis-
mas pautas que utilizamos para
resolver un problema matemá-
tico. Lo mismo sucede al enamo-
rarnos o, simplemente, relacio-
narnos con otra persona.
No obstante, muchas otras si-
tuaciones que exigen raciocinio en
la toma de decisiones no suelen
ser tratadas adecuadamente. Al-
gunos ejemplos de estas situacio-
nes son buscar trabajo, analizar el
estudio publicado por un investi-
gador, llevar la contabilidad do-
méstica... El resultado final puede
ser un pequeño desastre en lo per-
sonal. O una catástrofe si de la
gestión de una empresa multina-
cional o de un país se trata.
En Irracionalidad. El enemigo
interior, Stuart Sutherland res-
ponde a la pregunta de por qué
nos equivocamos tanto al razonar
y resolver problemas. A partir de
datos experimentales, Sutherland
va desgranando las causas de
tanto despropósito en gente co-
rriente... y profesionales del mé-
todo cartesiano: médicos, inge-
nieros o científicos en general.
Cada capítulo del libro empieza
con la descripción de un motivo
que puede provocar una respuesta
irracional frente a un determinado
problema y finaliza con una mora-
leja
, una declaración de intencio-
nes para no dejarnos superar por
esa irracionalidad.
Y todo ello con algunas gotas
de ácido humor que convierten a
esta pequeña obra en un manual
de sano escepticismo, de pensa-
miento crítico. Particularmente
interesante es el capítulo 22, titu-
lado “Lo paranormal”. Como dice
el autor, “al igual que otras formas
de irracionalidad, la creencia en
lo sobrenatural no se halla limi-
tada por clases o credos y afecta a
todas las instituciones, desde las
más altas hasta las más bajas”.
OSCAR SORIA
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Estados Unidos
Sutherland, Stuart [1992]: Irra-
cionalidad. El enemigo interior.
[Irrationality, the enemy within]
.
Trad. de Celina González.
Alianza Editorial (Col. “El libro
de bolsillo “, Nº 1.819). Madrid.