Versión
española de Jose L. Cebollada
ARP-SAPC, Sociedad para el Avance del Pensamiento
Crítico. España
docentes@arp-sapc.org
A
todos nos ha pasado alguna vez (a astrónomos
profesionales o aficionados, profesores) hablamos
de nuestro interés por el cosmos y rápidamente
nos encontramos participando en un debate sobre la
astrología. Para muchos de nosotros no es fácil
saber cómo contestar con corrección
a quienes toman en serio esta antigua superstición.
Saber
que la agenda de Ronald Reagan [presidente de Estados
Unidos en la década de los 80] se elaboraba
siguiendo las predicciones de un astrólogo
de San Francisco, supone un nuevo aviso sobre la masiva
aceptación de la astrología. Hoy más
que nunca tenemos que discutir sobre la astrología,
sobre todo con los jóvenes. Aquí se
presenta una rápida guía con algunas
respuestas para contestar a los argumentos de los
astrólogos.
Las
bases de la astrología
La base de la astrología es demasiado simple:
el carácter y el destino de una persona se
pueden comprender a partir de la posición del
Sol, la Luna y los planetas en el momento de su nacimiento.
Si se interpreta la ubicación de esos cuerpos
celestes utilizando una carta llamada horóscopo,
los astrólogos sostienen que predicen y explican
la vida de las personas y pueden ayudar a empresas,
naciones o personas en la toma de grandes decisiones.
Aunque
todas estas afirmaciones puedan parecer inverosímiles
a quienes saben cuál es la distancia al Sol,
a la Luna o a los planetas, una encuesta de Gallup
realizada en 1984 revelaba que el 55% de los adolescentes
estadounidenses creían en la astrología.[para
datos sobre España se puede consultar el nº
6 de la revista El Escéptico, (www.el-esceptico.org)].
Cada día miles de personas de todo el mundo
toman decisiones importantes, decisiones médicas,
profesionales o personales basándose en los
consejos de astrólogos o de publicaciones astrológicas.
La
astrología tiene varios miles de años
y aparece de diferente forma en culturas diferentes.
Los detalles concretos de su origen se pierden en
la antigüedad; si bien es cierto que surgió
en un momento en el que la visión del mundo
estaba dominada por la magia y la superstición,
cuando comprender el funcionamiento de la naturaleza
era una cuestión de vida o muerte.
En
aquellos días los astros parecían dioses
o espíritus o, cuando menos, símbolos
o representaciones de personajes divinos que se entretenían
jugando a con la vida de los hombres. En el cielo
la gente buscaba ávidamente indicios sobre
los planes que los dioses tenían para ellos.
Visto
en este contexto, un sistema que relacionaba el brillo
de los planetas y las constelaciones ‘importantes’
con las preguntas trancendentes de la vida era atractivo
y tranquilizador. (Los astrólogos creen que
las constelaciones importantes son las que el Sol
atraviesa a lo largo del año; ellos le llaman
constelaciones del zodiaco). Incluso hoy, a pesar
de los esfuerzos realizados en educación científica,
no ha disminuido la influencia que la astrología
tiene para mucha gente. Para ellos, pensar en Venus
como un mundo desierto cubierto de nubes y tan caliente
como un horno es mucho menos interesante que considerarlo
como una ayuda para decidir con quién casarse.
10
preguntas comprometedoras
Podemos empezar analizando las ideas astrológicas
desde un punto de vista escéptico y con humor,
considerando las consecuencias de sus afirmaciones.
Estas son mis 10 preguntas favoritas:
1
¿Cuál es la probabilidad de que a una
doceava parte de la humanidad le suceda lo mismo en
un día?.
Los que escriben las predicciones astrológicas
en los periódicos (sólo en Estados Unidos
aparecen más de 1200 predicciones diarias)
[en España aparecen en casi todos los diarios]
te anuncian lo que te va a suceder ese día.
No tienes más que leer una de las doce predicciones.
Un pequeño cálculo nos muestra que a
500 millones de personas le va a ir igual de bien
(o de mal) en ese día.
Como hay que contentar a tanta gente a la vez, las
predicciones astrológicas se redactan de una
manera muy vaga y genérica .
2
¿Por qué se fijan los astrólogos
en el momento del nacimiento en lugar de en el día
de la concepción?
Hay quienes creen que la astrología es científica
porque se basa en un dato exacto: la fecha de nacimiento.
Cuando la astrología comenzó hace mucho
tiempo, el momento del nacimiento se consideraba como
el momento crucial en la creación de la vida.
Hoy, sin embargo, entendemos que el nacimiento no
es más que la culminación de nueve meses
de desarrollo en el interior del seno materno. Además
los científicos sostienen que muchos aspectos
de la personalidad del niño se desarrollan
antes del alumbramiento.
Sospecho que si los astrólogos mantienen la
importancia de la fecha de nacimiento lo hacen por
motivos alejados de la astrología: todo
el mundo sabe cuándo nació pero no es
fácil (y a veces puede resultar embarazoso)
preguntar por la fecha de la concepción. Los
astrólogos utilizan la fecha de nacimiento,
muy fácil de recordar, para que sus predicciones
parezcan lo más personalizadas posible.
3
Si el vientre materno puede protegernos de las influencias
astrológicas, podríamos conseguir los
mismos resultados con un ‘cabina de carne’?
¿Cómo podemos protegernos de las poderosas
influencias de los astros hasta el día de nuestro
nacimiento sólo con una delgada capa de piel
y músculos? Si es así, y el horóscopo
de un niño que va a nacer será desfavorable,
¿podríamos retrasar las adversas influencias
astrológicas colocando al recién
nacido en el interior de una ‘cabina de carne’ hasta
que los astros vuelvan a serle propicios?
4
Si los astrólogos son tan buenos como dicen
¿por qué no son ricos?
Unos responden diciendo que no pueden predecir acontecimientos
concretos, sólo tendencias generales. Otros
dicen que sólo pueden predecir grandes acontecimientos,
no los pequeños. Incluso en este caso los astrólogos
podrían ser multimillonarios prediciendo las
tendencias generales de comportamiento de las bolsas
y así no tendrían por qué cobrar
a sus clientes tarifas tan elevadas. ¿cuántos
astrólogos predijeron el ‘lunes negro’ de la
bolsa [de Nueva York] de octubre de 1987 y advirtieron
a sus clientes?
5
¿Son incorrectos los horóscopos que
se hicieron antes del descubrimiento de los tres planetas
exteriores?
Algunos
astrólogos opinan que el signo del zodíaco
(la posición del Sol en el zodiaco en el momento
del nacimiento), el único horóscopo
que aparece en la mayoría de los periódicos,
no es una buena guía de los efectos del cosmos.
Estos astrólogos serios (suelen ser astrólogos
que han fracasado en el lucrativo negocio de las columnas
de periódicos) insisten en que también
hay que tener en cuenta la influencia de los grandes
cuerpos solares -incluyendo los planetas exteriores,
Urano, Neptuno y Plutón (descubiertos en 1781,
1846 y 1930, respectivamente).
En tal caso ¿cómo quedan todos los astrólogos
que dicen que su práctica astrológica
es fiable porque desde hace siglos se hacen predicciones
exactas? ¿Son erróneos los horóscopos
anteriores a 1930? ¿Por qué no se dieron
cuenta los astrólogos de que había unas
influencias astrales desconocidas antes del descubrimiento
de Urano, Neptuno y Plutón? ¿Por qué
los astrólogos, no dedujeron la existencia
de Urano Neptuno y Plutón antes de que se descubrieran,
analizando las inexactitudes de sus predicciones?
6
¿Podríamos acusar a la astrología
de ser intolerante y discriminatoria?
En nuestra civilizada sociedad, rechazamos cualquier
sistema que discrimine a las personas por su sexo,
color de piel, religión, nacionalidad o cualquier
otra circunstancia de su nacimiento. Hoy los astrólogos
presumen de que pueden valorar a las personas basándose
en otra circunstancia de su nacimiento: la posición
de los astros. El no querer salir con un Leo o no
contratar a un Virgo, ¿no es tan malo como
no querer salir con un católico o no contratar
a una persona de color?
7
¿Por qué mantienen opiniones tan distantes
las diferentes escuelas de astrología?
Parece que los astrólogos no se ponen de acuerdo
en algunos aspectos fundamentales de su trabajo: si
hay que tener en cuenta o no el movimiento de precesión
del eje de rotación de la Tierra, cuántos
planetas y objetos celestes hay que tener en cuenta
y, lo más importante, qué rasgo de la
personalidad está asociado con cada fenómeno
cósmico. Lee 10 columnas de horóscopo
diferentes y seguramente encontrarás 10 interpretaciones
diferentes.
Si, como dicen los astrólogos, la astrología
es una ciencia ¿por qué no llegan, después
de miles de años de acumular datos e interpretaciones
cada vez más refinadas, a una teoría
aceptada por todos? Las ideas científicas acaban
convergiendo al ser evaluadas y comprobadas en los
laboratorios o por otros medios. Por el contrario,
los sistemas basados en la superstición o en
las creencias personales suelen divergir cuando los
seguidores excavan nichos separados mientras están
embaucando a la gente por poder, dinero o prestigio.
8
¿Si la influencia astrológica se transmite
mediante una fuerza conocida, por qué los planetas
son los que más influyen?
Si los efectos de la astrología pueden atribuirse
a la gravedad, las fuerzas de las mareas o el magnetismo
(cada escuela astrológica invoca uno diferente),
incluso los estudiantes de primeros cursos de física
saben hacer los cálculos necesarios para ver
qué es lo que de verdad afecta a un recién
nacido. Roger Culver y Philip Ianna, en su libro ‘Astrology:
true or false’(1988, Prometeus Books [hay traducción
española: Astrología :¿mito o
realidad?. Tikal ediciones, Gerona, 1994]), analizan
algunos. Por ejemplo, el medico que ayuda en el parto
ejerce una atracción gravitatoria unas seis
veces la de Marte y unos dos billones (dos millones
de millones) de veces la fuerza de las mareas. El
médico tendrá mucha menos masa que Marte,
pero está mucho más cerca del niño.
9
Si la influencia astrológica se ejerce a través
de una fuerza desconocida ¿por qué es
independiente de la distancia?
Todas las fuerzas de largo alcance del Universo son
más débiles cuanto más nos alejamos
del objeto que la crea. Pero, como era de esperar
en un sistema geocéntrico elaborado hace miles
de años, las influencias astrológicas
no dependen de la distancia. La importancia de Marte
en tu horóscopo es la misma si el planeta está
al mismo lado del Sol que la Tierra que si Marte se
encuentra al otro lado del Sol. Una fuerza que no
dependiera de la distancia sería un descubrimiento
revolucionario y cambiaría muchos de nuestros
principios científicos fundamentales.
10
¿Si las influencias astrológicas no
dependen de la distancia ¿por qué no
hay astrología de las estrellas, de las galaxias
o de los cuásares?
El astrónomo francés Jean-Claude Pecker
ha señalado que los astrólogos son muy
estrechos de miras al limitar sus energías
al sistema solar. Miles de millones de maravillosos
cuerpos celestes que se mueven por el Universo deberían
sumar sus efectos al de nuestros pequeñitos
Sol, Luna y planetas. ¿ Se puede elaborar un
buen horóscopo omitiendo los efectos de Rigel,
el púlsar de la nebulosa del Cangrejo o la
galaxia Andrómeda?
Examinar
a la astrología.
Incluso
si concedemos a los astrólogos el beneficio
de la duda sobre todas estas preguntas -y aceptamos
que, aunque no sepamos cómo, las influencias
astrológicas existieran- hay una cuestión
aplastante: la astrología sencillamente no
funciona. Hay muchos estudios que demuestran que,
digan lo que digan los astrólogos, no pueden
predecir nada.
Después
de todo, no necesitamos saber cómo funciona
algo para decidir si funciona o no. Como parece que
los astrólogos han estado demasiado ocupados
para validar estadísticamente su trabajo, algunos
científicos y estadísticos lo han hecho
por ellos. Veamos algunos ejemplos representativos.
Bernard
Silverman, psicólogo de la Universidad de Michigan,
revisó las fechas de nacimiento de los 2978
matrimonios y 478 divorcios ocurridos en el estado
de Michigan. Los astrólogos sostienen que pueden
predecir la compatibilidad o incompatibilidad personal
entre signos del zodiaco. Silverman comparó
las predicciones con los registros y no encontró
ninguna correlación: los ‘signos incompatibles’
se divorciaban en una proporción similar a
la de los ‘signos compatibles’.
Muchos
astrólogos recalcan que el signo del zodiaco
está relacionado con la profesión elegida.
De hecho la asesoría laboral está ganando
importancia en la astrología moderna. El físico
John McGervey, de la Universidad Case Western Reserve,
examinó las fechas de nacimiento de 6000 políticos
y de 10.000 científicos para ver si en algunas
profesiones predominaba algún signo del zodiaco,
tal como predecían los astrólogos. Comprobó
que los signos de zodiaco se distribuían totalmente
al azar.
El
físico Shawn Carlson, del Lawrence Berkeley
Laboratory, quiso vencer la objeción de los
astrólogos de que hacen falta más datos
que el signo del zodiaco para hacer predicciones,
e hizo un ingenioso experimento. Pidió a un
grupo de voluntarios que dieran los datos necesarios
para elaborar su horóscopo completo. También
se les pidió que hicieran el ‘California Personality
Inventory’, un cuestionario psicológico estándar
que utiliza el mismo tipo de términos generales
descriptivos que utilizan los astrólogos.
Una
“prestigiosa” organización astrológica
elaboró los horóscopos de los voluntarios.
Se envió a cada uno de los 28 astrólogos
profesionales que participaban voluntariamente en
el experimento, un horóscopo y tres perfiles
de personalidad: uno de los tres perfiles pertenecía
a la persona del horóscopo. Los astrólogos
debían interpretar el horóscopo y decidir
a cuál de los tres perfiles correspondía.
Otros
estudios revelan que el acierto de las predicciones
está relacionado con el sentimiento que tienen
los destinatarios de que los horóscopos se
han hecho personalmente para ellos. Hace unos años,
el estadístico francés Michel Gauquelin
envió el mismo horóscopo (pertenecía
a uno de los más sangrientos asesinos en serie
de Francia) a 150 personas y les preguntó si
se sentían identificados con él. El
95% dijo que se reconocía a sí mismo
en la descripción.
El
investigador australiano Geoffrey Dean que había
realizado muchas pruebas sobre la astrología,
manipuló las predicciones astrológicas
de 22 personas, sustituyendo algunas frases por otras
que significaban justamente lo contrario de lo que
les había predicho el horóscopo. El
grado de acierto era idéntico (95% de los casos)
tanto para los que habían recibido su horóscopo
intacto como para los que se les había cambiado
frases. Parece que los que consultan a los astrólogos
buscan consejo, cualquier consejo.
Hace
algún tiempo los astrónomos Culver y
Ianna siguieron las predicciones publicadas por organizaciones
astrológicas y astrólogos conocidos
durante 5 años. De las más de 3000 predicciones
concretas (incluyendo muchas sobre políticos,
estrellas de cine y gente famosa) sólo sucedió
un 10%. Cualquier periodista veterano -y probablemente
la mayoría de la gente informada- podría
haber obtenido mejores resultados haciendo una estimación
razonada.
Si
las estrellas conducen a los astrólogos a predicciones
incorrectas 9 de cada 10 veces, difícilmente
podrían ser guías fiables para tomar
decisiones sobre la vida o sobre asuntos de estado.
Aún así para millones de personas, incluyendo
a Nancy Reagan (esposa del ex-presidente Ronald Reagan),
no hay nada como la astrología
Quienes amamos la astronomía no podemos sentarnos
a esperar que el atontamiento público hacia
la astrología desaparezca por sí solo.
Tenemos que hablar; hablar cuando creamos que es útil
o apropiado -para discutir los puntos flacos de la
astrología y el inestable suelo en el que se
apoya. Quienes trabajamos con los más jóvenes
tenemos que usar estas ideas para desarrollar un escepticismo
sano en los estudiantes y para fomentar el interés
por el auténtico cosmos, el de los mundos remotos
y los soles distantes que, afortunadamente, no tiene
nada que ver con las vidas y los deseos de los habitantes
del planeta Tierra. No permitamos que otra generación
de jóvenes crezca amarrada a una vieja fantasía,
propia de aquellos tiempos en los que los hombres
nos apretujábamos alrededor de una hoguera,
asustados por la oscuridad de la noche.