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DOBLAR
CUCHARAS
CON
LA MENTE
Hace un par de meses, en TVE 1 apareció, una vez más, el
inefable Uri Geller doblando cucharas con la mente. Los
presentadores: José María Iñigo –una vez más– y Concha
Velasco –nueva en estas lides– insistieron en que era ver-
dad que Uri Geller doblaba cucharas con el poder de la
mente. Está claro que Uri Geller no dobla las cucharas con
la mente, pero usted sí puede hacerlo.
Hace unos días, tuve una reunión en la
que había media docena de personas entre
los cincuenta y sesenta años de edad, y
una docena de jóvenes. No sé muy bien
porqué salió el tema del programa de Iñi-
go/Velasco con el prestidigitador húnga-
ro/austriaco/israelí Uri Geller, que debió
de tener lugar en TVE1 el miércoles 19 de
septiembre del 2001.
Yo no vi el programa; pero por lo que me contaron fue
lo de siempre, con especial énfasis en doblar cucharas.
Me sorprendieron varias cosas. La primera es que los
jóvenes nunca habían oído hablar de Uri Geller ni de do-
blar cucharas. Eso lo entendí a medias; la primera vez
que Uri estuvo en España, en el programa de Iñigo, fue
en el año 1975, si no recuerdo mal. Hace demasiado
tiempo para que ellos lo hubieran visto; aunque no de-
jaba de sorprenderme porque con posterioridad había es-
tado de gira por varias televisiones locales, incluyendo la
ETB del País Vasco. Pero lo que me desconcertó del todo
es que las personas mayores de cincuenta años tampoco
se acordaban de Uri Geller.
En principio me pareció estupendo. “Por fin, las ton-
terías del doblacucharas profesional nacido en Israel se
han olvidado”, pero...
–¡Ah, ya sé de que programa hablamos! –dijo una de
las señoras– me llamó mi hermana para decirme que mi-
rase la televisión, que había un señor que doblaba cu-
charas con el pensamiento. Y me puse a verlo. Estuvo
muy interesante. ¡Qué poderes!, ¿verdad?
–A mí me pasó lo mismo –añadió otra–, me llamó mi
prima para decírmelo. Fue extraordinario. ¡Qué poderes!
Entonces mi primera impresión de que “por fin las
tonterías de Uri Geller se habían olvidado” se vino aba-
jo. La falta de memoria hace que los espectadores repi-
tan los mismos errores que otros, y ellos mismos, come-
tieron en su día. Con una diferencia notable, la primera
vez que salió Uri Geller era novedad. Nos pilló de sor-
presa. Pero en los siguientes días varios periódicos pu-
blicaron que hacía trucos, que era un antiguo prestidi-
gitador israelí travestido en dotado. Después salió el libro
de Ramos Perera [1975] en el que, entre otras cosas, ha-
bía fotos de Uri Geller, en su actuación de 1975 en el
programa de Iñigo, en las que se veía la cuchara ya rota
antes de empezar a doblarla “con la mente”. Después
aparecieron muchos libros entre los que destaco el de Ja-
mes Randi [1982].
Creer, en 1975, que Uri podía tener algún poder era
absurdo pero mucho menos que seguir pensándolo hoy
cuando ya se han publicado multitud de libros, artículos
y programas de televisión mostrando el fraude del su-
puesto “dotado”.
Siempre había pensado que las creencias en poderes
paranormales debían ir evolucionando porque se veían
obligadas a ello, ya que los “escépticos” demostraban su
falsedad. Pero estaba equivocado. En temas paranorma-
les no importa cuantas veces se demuestre que una cosa
es falsa, siempre habrá más creyentes. Y probablemen-
te, cuanto más se demuestre que es fraude, más se ha-
blará de ello y más creyentes habrá. ¡Qué cruz! ¡Un buen
mito nunca muere!
La gente, tanto la joven como la mayor, me sorpren-
de por su credulidad, pero ¿qué decir de esa televisión
el esc
é
ptico
primavera- verano 2001
6
PRIMER CONTACTO
TIME WEB
SITE
Página en la web de la revista
estadounidense Time,
de 4 de junio del 2001 (Vol.157 Núm. 22),
en la que se habla del descubrimiento
del centro de investigación coreano.
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pública –TVE1– que vuelve a traer a Uri Geller 26 años
después, tras haberse publicado cómo se hacen sus tru-
cos? ¿Qué pensar de un presentador –José María Iñigo–
que tras 26 años vuelve a traer al mismo mago y vuelve
a decir que no hay truco, después de haber leído el libro
de Ramos Perera? Les recuerdo que en ese libro se ven
las fotos con el truco al descubierto tal como se emitió en
el programa de Iñigo. ¿Qué Iñigo no ha leído el libro? Lo
dudo. Yo mismo le envié una copia y me conocía per-
fectamente pues había estado en sus programas. ¿Qué
pensar de los responsables de los medios de comunica-
ción públicos –subrayo públicos– a los que sólo preocu-
pa la audiencia y hacen caso omiso de la calidad de los
programas que emiten? ¿Qué pensar de un parlamento
que tolera una televisión pública con programas de este
estilo y sigue financiándola con nuestro dinero? ¿Cómo
justifican dicho dinero? ¿Si hacen los mismos programas
basura que el resto de televisiones, el tener doble finan-
ciación –pública y privada–, no es competencia desleal?
¿Qué dicen nuestros gobernantes?...
Mis reflexiones siguen y siguen pero no quiero abu-
rrirles. Además no quiero ser fraudulento, el título era
“Doblar cucharas con la mente” y todavía no les he en-
señado a hacerlo.
Para doblar cucharas con la mente usted necesita el
intermedio de un ordenador. La máquina lee su electro-
encefalograma y aprende cómo diferenciar las señales
que usted produce cuando está activo y cuando se en-
cuentra en reposo. La máquina le pide que se relaje y
cuando usted lo logra, una cuchara virtual, representada
en el monitor del computador, se dobla. Sí, así, tal cual,
usted dobla la cuchara con el poder de su mente cuando
ésta está relajada. La relajación, tal como dicen los pa-
rapsicólogos, ya ven ustedes que resulta fundamental.
–Claro, pero eso es trampa, no es una cu-
chara de verdad.
No se preocupe, de momento, el pro-
grama informático, desarrollado por el Ko-
rea Research Institute, la dobla en una
pantalla de computador. Sin embargo, no
hay ningún problema en poner una cucha-
ra real en las manos de un robot y que éste,
al verle a usted relajado, doble la cuchara.
Como usted sea una persona tranquila
¡vaya gasto en cucharas!
BIBLIOGRAFÍA
Perera, Ramos (1975). Uri Geller al descu-
bierto
. Sedmay Ediciones.
Randi, James (1982). The truth about Uri
Geller
. Prometheus. (la edición revisada es
de 1982).
(F.A.de B.)
¿QUIERE USTED
SER
MILLONARIO
?
Para conseguirlo no necesita ir a ningún concurso. Sólo
tiene que demostrar eso que predica allá donde va: sus
poderes paranormales. Si es capaz de encontrar agua en
el desierto, de comunicarse con otras personas, de adi-
vinar el pasado de los demás, o “simplemente” mover
un autocar con el poder de su mente, el laboratorio
Zetetics está dispuesto a premiarle con 200.000 euros
(33.277.200 pesetitas). Claro, que antes deberá demos-
trarlo, porque los señores H. Broch, G. Majax, y J.
Theodor, responsables del premio, no están dispuesto a
dárselo a cualquiera.
primavera- verano 2001
el esc
é
ptico
7
ARCHIVO
Jose Mª Iñigo presenta a Uri Geller en el
programa Directísimo de TVE.
Félix Ares de Blas, doblacucharas aficionado y autor
de esta nota, ha doblado cucharas –por supuesto, di-
ciendo que era un truco: el mismo que emplea Uri– en
varios programas de ETB, en Teledonosti y en Loaca-
lia Guipúzcoa. También ha arreglado relojes estropea-
dos por radio, colapsando la centralita de Radio San
Sebastián, etc.
P
ARA MÁS INFORMACIÓN
sobre el Korea Research Ins-
titute en http://ard.etri.re.kr/eng/main.htm y
http://www.time.com/time/interactive/technology/brai
n_np.html.