el esc
é
ptico
49
primavera-verano 2013
Aplicada, kinesiología (o quinesiología). Es una su-
puesta técnica de diagnóstico también conocida simple-
mente como AK (por las siglas en inglés de “Applied Ki-
nesiology”). Consiste en tener el sujeto de pie con una sus-
tancia de prueba en una mano, mientras estira el otro brazo
lateralmente en ángulo recto respecto a su costado. Enton-
ces, el “terapeuta” pone su palma sobre el brazo estirado y
presiona hacia abajo con una cierta fuerza, intentando bajar
el brazo y evaluando el grado de fuerza requerido para con-
seguir su objetivo. Entonces lo compara con el grado de
fuerza que necesita para bajar el brazo cuando el individuo
no sostiene la sustancia de prueba o sostiene una sustancia
“mala”.
Los defensores de esta técnica afirman que cuando se
sostiene una sustancia perjudicial, el “terapeuta” podrá ba-
jar el brazo del sujeto aplicando poca fuerza; pero, en cam-
bio, cuando se trata de una sustancia beneficiosa o inocua,
se necesita una fuerza mucho mayor, ya que el cuerpo no
está debilitado por las vibraciones de la sustancia negativa.
El efecto observado se debe enteramente a las expecta-
tivas del operador, y esto se puede demostrar fácilmente
mediante una prueba “ciega”, en la que el operador ignora
el resultado esperado. Como prueba de que la idea de la AK
es pura magia simpática, basta saber que los postulantes
afirman que pueden demostrar mediante este método que
el azúcar refinado es una “mala” sustancia cuando el sujeto
tiene en la mano azúcar normal, y que también se muestra
el mismo efecto cuando el sujeto tiene en la mano un trozo
de papel con la palabra “azúcar” o la fórmula química C
12
H
22
O
11
(glucosa) escrita en lugar de la sustancia real. Los
creyentes en la AK no tienen ningún problema en raciona-
lizar el absurdo que supone tal afirmación.
En los Estados Unidos, en respuesta a una creciente de-
manda de estupideces, se ofrecen carísimos cursos a mé-
dicos y dentistas en los que se enseña que la AK es una
Una
enciclopedia
de las
afirmaciones, fraudes y engaños de
lo oculto y lo sobrenatural
cuarta entrega
James Randi
Traducción: Antoni Escrig Vidal
Santo Tomás de Aquino (Foto: Wikimedia Commons)
el esc
é
ptico
50
primavera-verano 2013
herramienta de diagnóstico, y muchos médicos, sensatos
en otros aspectos, han realizado estos cursos aceptando el
efecto como cierto.
La AK ha sido testeada de manera rigurosa, y siempre se
ha hallado ineficaz.
Apport. Una sustancia u objeto que se dice que es trans-
ferida de un lugar a otro sin pasar a través del espacio-tiem-
po normal. El proceso de “teletransporte” de la serie de
ciencia-ficción Star Trek cumpliría esta definición, aunque
hasta el momento es un concepto totalmente mítico.
En espiritismo, un apport es cualquier objeto o sustancia
materializado en la sesión por fuerzas aparentemente so-
brenaturales. Incluso olores percibidos por los asistentes se
consideran pruebas de apports. Lamar Keene, un espiritista
reformado de la zona de Florida decía sobre esta materia
“probatoria”:
Compraba cosas baratas en las tiendas de barrio, sa-
caba las pegatinas y las introducía en la sesión. No ne-
cesitaba ningún truco de prestidigitación. Las lanzaba al
aire cuando las luces estaban apagadas y los asistentes se
apresuraban para cogerlas. ¡Todos eran felices!
(véase también asport).
Aquilaeus (véase bezoar).
Aquino, Santo Tomás. (¿1225?-1274). Destacado filó-
sofo cristiano conocido como Doctor Angélico, que escri-
bió de manera extensa sobre teología, metafísica y misticis-
mo. Su Summa Theologica es una de los libros básicos de
la Cristiandad. Al igual que como otras figuras destacadas,
se ha desarrollado una cierta mitología sobre la historia de
su vida. Cuando Santo Tomás murió sin completar su obra,
otros escritores lo relevaron escribiendo algunas de sus sec-
ciones.
(véase también Diablo y Brujería).
Arcano, El Gran. El misterioso, omnipresente “secre-
El arcángel Gabriel y María en La Anunciación, cuadro de Fra Angélico (foto: Wikimedia Commons)
el esc
é
ptico
51
primavera-verano 2013
to” que se supone que explica y permite alcanzar todas las
fuerzas, poderes y conocimientos mágicos. No se sabe si
ha sido revelado a alguien.
Arcángel. Se acepta popularmente que hay dos tipos de
ángeles: los corrientes (los ángeles estándar) y los arcán-
geles, una especie de super-ángeles. En la Biblia, sin em-
bargo, solo se hacen dos referencias a este alto rango. En
una ocasión a Miguel se le nombra como arcángel, y más
tarde se dice que en cierto momento “el Señor descenderá
del cielo… con la voz del arcángel”. De este modo no está
claro qué significa este rango, aunque los arcángeles son,
sin duda alguna, tan reales como los ángeles normales.
En el Corán se enumeran cuatro ángeles: Gabriel, a cargo
de las revelaciones, Miguel, el guerrero, Azraël, el portador
de la muerte y Azrafil, cuya única función es la de llevar un
gran cuerno para tocar el Último Triunfo.
En la Biblia se describe el arcángel Miguel como una
especie de militar que mata a un dragón, se le llama “prínci-
pe”, está en cargo de la virtud humana y comanda naciones.
Un ángel muy ocupado.
ARE (véase Asociación para la Investigación y la Ilus-
tración por las siglas en inglés de “Association for Re-
search and Enlightenment”).
Arigó, José. (1918-1971). El brasileño José Pedro de
Freitas se puso de nombre Arigó cuando alcanzó la fama en
1950 como curandero nativo. Afirmaba ser capaz de operar
el cuerpo humano sin realizar incisiones, aunque en algu-
nas ocasiones usaba una navaja de bolsillo sin esterilizar.
Arigó decía que el espíritu del “Doctor Adolf Fritz” le susu-
rraba en su oído derecho. Se supone que este “estudiante de
medicina” alemán murió en el siglo XIX, aunque no existe
ninguna prueba de la existencia de esa persona.
Arigó garabateaba, de forma ilegible, recetas a sus pa-
cientes. La única persona capaz de leerlas era su cuñado,
quien afortunadamente regentaba la farmacia local, pudien-
do suministrar todas las recetas de Arigó. Un equipo médi-
co encabezado por el Dr. Andrija Puharich, el cual admitió
que era incapaz de comprender las recetas, presentó un in-
forme afirmando que Arigó (un hombre iletrado) nunca ha-
bía cometido un error en la prescripción de una receta o en
el nombre de un medicamento. Esta increíble declaración
se presentó como prueba de la validez de las afirmaciones
de Arigó.
Aunque se afirmaba que los pacientes no sentían nin-
gún dolor o malestar cuando eran operados por Arigó, las
mismas películas de Puharich los muestran reaccionando
fuertemente a las incisiones para extraer sencillos quistes
y lipomas.
Arigó fue condenado en Brasil en 1957 por practicar
ilegalmente la medicina. Fue perdonado posteriormente, y
volvió a ser condenado en 1964. Murió en un accidente de
camión a la edad de cincuenta y tres años.
Armagedón. Aunque se usa comúnmente para designar
el fin del mundo, este nombre corresponde realmente a un
lugar de Israel cerca del monte Carmelo, a unos 8 km de la
ciudad costera de Haifa. Fue el lugar donde se celebraron
varias importantes batallas de la antigüedad.
Según las predicciones de San Juan en el Apocalipsis,
allí tendrá lugar una batalla entre el bien y el mal en un
plazo no especificado, produciendo un río de sangre huma-
na “hasta alcanzar la altura de una brida de caballo” a una
distancia de unos 321 km. Asumiendo que (a) se drenase
toda la sangre de cada uno de los cuerpos de las víctimas en
el mismo momento; que (b) el “río” tuviera apenas unos 3
metros de ancho y no desbordase nada; y que (c) el caballo
fuera más bien pequeño, significaría que aproximadamen-
te deberían morir asesinadas trescientos sesenta millones
de personas en la batalla, todas simultáneamente. Como su
superficie no puede albergar tal cantidad de personas apre-
tujadas, parece que los cálculos de San Juan fueron un tanto
defectuosos. Pero quizás esta sea una de las propiedades de
un milagro.
Arnold, Kenneth. Un piloto de avión que afirmó que ha-
bía visto nueve objetos voladores “con forma de platillos”
desde su avión privado cerca del Monte Rainier el 24 de
junio de 1947. Esto originó la expresión platillo volante
y desató la locura ovni, que aún permanece con nosotros,
como el resfriado común.
Artefius. Mago hermético del siglo XII, a menudo con-
fundido con Apolonio de Tiana. Se dice que vivió más de
1025 años, edad en la que escribió El arte de prolongar la
vida. Su longevidad es atribuida a los demonios. Seguro
que sí.
Arturo (Rey). Probablemente es un héroe/monarca/gue-
rrero totalmente mítico de Gran Bretaña que se cree que
reinó alrededor del año 500 D.C. La leyenda de Arturo está
muy relacionada con la del igualmente imaginario mago
Merlín.
Es posible que la historia de Arturo esté basada en la de
José Arigo (Foto: archivo)
el esc
é
ptico
52
primavera-verano 2013
un antiguo soldado romano, o de algún sucesor llamado Ar-
turo. Sin embargo, este terreno de la historia antigua ingle-
sa es muy incierto, y en gran parte parece haber sido creado
para satisfacer mitos anteriores.
Artorius (véase Arturo).
Ascendido, maestro. Un adepto o santo que enseña des-
de otro plano astral de existencia por medio de mensajes
de voz directos, sueños o visiones experimentadas por mís-
ticos. Una premisa dudosa.
Asiza. En la africana Dahomey (República de Benin),
son espíritus que viven en los bosques y proporcionan po-
deres mágicos a los humanos.
Asmodeo. El rey de los demonios según la mitología
hebrea, con tres cabezas, patas de ganso y cola de serpiente.
Es capaz de revelar a los hombres los tesoros escondidos
de la tierra y puede hacerlos invisibles. Su reina es Lilith.
(véase también Adán).
Asport. El fenómeno opuesto al apport. En este caso,
son objetos ya presentes en la sesión que se desvanecen. A
menudo son valiosos enseres que desaparecen en la oscura
sala y nunca son vistos de nuevo por sus propietarios.
ASPR - (véase Americana, Sociedad para la Investi-
gación Psíquica).
Asociación para la Investigación e Ilustración (ARE).
Con sede en Virginia Beach, Virginia, la ARE se fundó en
1931 por Edgar Cayce (1877-1945). Se dedica a perpetuar
las enseñanzas de Cayce sobre curación espiritual, reen-
carnación y otros temas. El centro cuenta con una amplia
biblioteca y un centro de conferencias asociado a la Uni-
versidad Atlantic. La ARE promociona remedios herbales,
baños y ayuno como métodos para curar enfermedades, de
la misma forma que lo prescribió Cayce.
Astral, cuerpo. Se considera un duplicado del cuerpo
físico humano, pero compuesto de materia más ”ligera”
que el más denso cuerpo “real”. Se supone que experimen-
ta las sensaciones en nombre del cuerpo físico, comuni-
cándoselas después. Abandona el cuerpo físico durante el
sueño, o como resultado de un trauma como una herida o
el consumo de drogas. Este concepto parece satisfacer la
mayor parte de las cuestiones sobre los sueños, la muerte
o alucinaciones, sin presentar ninguna otra prueba que la
conveniencia de tales invenciones y la resultante falta de
pensamiento aplicado o investigación.
Astral, plano. Uno de los lugares, niveles o dimensiones
difusas que, según los ocultistas, existen paralelamente al
mundo real. Un plano es a menudo habitado por demonios,
espíritus u otras entidades de otro mundo. Oz y el país de
las maravillas pueden ser sus equivalentes.
Astral, proyección. Viajar fuera del cuerpo vía planos
astrales, un concepto que probablemente se deriva de las
experiencias de sueños muy vistosos y memorables.
Astrológico, signo. (véase astrología, horóscopo y zo-
diaco).
Carta de Arnold Kenneth con el dibujo de los platillos volantes (foto: Wikimedia Commons)
Estatua del Rey Arturo, Hofkirche, Innsbruck (Foto: Wikimedia Commons)