background image

el esc

é

ptico

10

Verano 2019

El Imperio contrataca

Así llama Emilio Molina la situación que estamos 

viviendo. Con tantas iniciativas de desenmascara-

miento de las pseudociencias, algunos de los que se 

sienten perjudicados están comenzando con ofensivas 

judiciales (que se lo pregunten por ejemplo a Fernan-

do Cervera o al propio Emilio), o incluso acoso perso-

nal (como el que ha sufrido Elena Campos, presidenta 

de la 

Apetp

). Pero no está ocurriendo solo en España. 

Desde Francia nos llega una noticia a través del muy 

recomendable blog 

Rédaction  medicale  et  scientifi

-

que

3

, y que reproducimos aquí con permiso del autor, 

el Dr. Maisonneuve:

Defendamos a los buenos periodistas atacados 

por G.E. Séralini, el que decía que los OMG y el gli-

fosato resultaban tóxicos en ratas.

Al igual que Wakefield (el de las vacunas y el autis

-

mo), G.E. Séralini no soporta las críticas. El 

Journal 

International de Médecine

 (

JIM

) del 3 de mayo de 

2019 informaba de que G.E. Séralini se iba a quere-

llar contra tres periodistas: Patrick Cohen (

C à vous

), 

Mac Lessgy (

M6

) y G. Woessner (

Europe 1

), quie-

nes habían criticado los estudios fraudulentos de este 

investigador. Géraldine Woessner demuestra estar 

especialmente bien documentada al respecto y tam-

bién que sabe analizar los datos en sus columnas ha-

bituales en 

Europe 1

, en otros medios, y en su cuenta

@GeWoessner, donde se ciñe a los hechos sin dar lu-

gar a opiniones dudosas.

Séralini es ese investigador al que se le retiró un 

artículo (aquel sobre la toxicidad de los OMG y del 

glifosato en ratas de laboratorio), y que luego repu-

blicó sin rubor con la complicidad de otra revista. Y 

lo peor es que con ello se malgastaron 15 millones de 

euros de fondos públicos por varios centros de inves-

tigación para confirmar o desmentir sus resultados. La 

conclusión es clara: resulta imposible reproducir los 

estudios de G.E. Séralini.

Ello no ha impedido que 

France 2

 (programa 

En-

voyé spécial

) le dé de nuevo la palabra para seguir di-

fundiendo su desinformación. El Sr. Séralini se habrá 

enfadado, pero primero debería dar a conocer los da-

tos originales de su estudio y respetar las buenas prác-

ticas de la investigación científica. Además de contra 

los tres periodistas que tiene en el punto de mira, le 

sugeriría que se querellara:

y

y

Contra los tres promotores de estudios que no 

han reproducido sus resultados.

y

y

Contra los seis académicos firmantes de un co

-

municado en el que refutan las conclusiones de Sé-

ralini.

y

y

Y contra mí, para así sumar diez. Bueno, y con-

tra el 

JIM

, para hacer once…

Hervé Maisonneuve

Un curandero serbio, condenado a cadena perpetua

Quizá nos parezca un castigo excesivo incluso 

a escépticos tan integristas como nosotros, pero así 

ha ocurrido con el Dr. Dragan Dabic, psiquiatra ser-

bio graduado en la Universidad Estatal de Moscú en 

Lomonósov, y luego formado en las medicinas tradi-

cionales japonesa, india y china. Se especializó en el 

G.E. Séralini (Foto: Thomas Jouanneau, Wikimedia)