La intolerancia del fanatismo más radical (ideas pequeñas en mentes que aún lo son más) ha vuelto a atacar a un medio de comunicación laico precisamente por serlo; una revista que además hacía gala de ello, de su carácter no confesional e independiente y de su libertad de expresión para criticar todo lo humano y 'divino' que considerara digno de ello, tal como era su derecho y tal como todos debemos defender.
Pero como se ha visto tantas otras veces, algunas personas no soportan las críticas en absoluto 'así en la tierra como en el cielo', siendo la muerte su única respuesta ante las mismas.
La violencia contra las voces que envían un mensaje diferente al que desean oír las autoridades o los grupos violentos sigue siendo por desgracia una realidad en un mundo en el que cada día vemos como muere gente por defender derechos humanos básicos.
Vale la pena en este contexto recordar ahora el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (firmada por naciones de todo el mundo, con todo tipo de autoridades gubernativas y creencias, muchas de ellas muy religiosas) que aboga por un mundo en el que todas las personas tengan derecho "a la libertad de opinión y de expresión" y que este derecho incluya "el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión".
Vemos así como un principio tan importante para una entidad como la nuestra como es el de la libertad de investigación, viene de la mano de otro como es el de la libertad para recibir informaciones y para difundirlas sin ningún límite. Sin duda, todos ellos están muy fuertemente entrelazados para los que defendemos el pensamiento crítico.
Como entre los objetivos que figuran en la misión de ARP-SAPC, se encuentra impulsar el laicismo, conjuntamente con la ciencia y la investigación científica, el pensamiento crítico, la educación científica y el uso de la razón, no podemos menos que condenar absolutamente el ataque contra la revista 'Charlie hebdo' por un grupo de fanáticos religiosos, así como dar nuestro más firme y cálido apoyo a todas las víctimas y a sus familias.