EL ESCÉPTICO DIGITAL
Edición 2010 - Número 9 (235) - 14 de febrero de 2010
Arturo Bosque Foz
Heraldo de Aragón
Jueves 8 de octubre de 2009
CARTAS
Homeopatía y universidad
De niño, por los años cuarenta y cincuenta del siglo pasado, cuan do
aprender algo más que a leer y escribir no estaba al alcance de to dos,
idealicé la universidad como el templo de la razón. Allí se ense ñaba la
Verdad, con mayúscula. Las supersticiones estaban en el pue blo sin cultura.
Ahora, a mis 68 años, ya no lo tengo tan claro. El 3 de octubre apareció en
HERALDO un artículo titulado 'La homeopa tía llega a los centros de salud',
en el que se afirmaba que médicos es tudiantes de Ho'meopatía en la
Universidad de Zaragoza pasan consulta... ¡Eh! ¿Mande? ¡Que en la
Universidad de Zaragoza se ense ña Homeopatía! ¿Y no se enseña también en la
Facultad de Ciencias que existe el número de Avogadro y que a partir de
ciertas diluciones elevadas la probabilidad de encon trar una partícula del
soluto es ce ro? Hay productos homeopáticos que sobrepasan con creces estos
lí mites. ¿Cómo van a actuar si no tie nen ni una sola partícula de
ele mento activo? ¿Por arte de birlibir loque? ¿Por la magia de la memo ria
del agua? ¿En qué estructura se esconde esa supuesta memoria, si el agua es
simplemente HzO? ¡De risa! ¿Con estos sortilegios nos quiere curar el Salud?
Por favor, que la Universidad de Zaragoza expulse de sus facultades todas
las supersticiones.
Arturo Bosque Foz
Sabiñánigo
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HERALDO DE ARAGÓN
Sábado 10 de Octubre de 2009
CARTAS
¿Supersticiones?
La realidad es muy tozuda por sí misma. Vamos, que sus hechos, hechos son,
sin que importe un bledo que nuestra ciencia esté ya en condiciones de
explicarlos o que todavía (e insisto en ese toda vía) no pueda hacerlo. Tras
más de treinta años de ejercicio de la agronomía desde la perspectiva de un
ingeniero, esto se tiene pe ro que muy claro, porque muchos hechos
relacionados precisamen te con el mundo de lo biológico no están todavía
explicados por hipótesis científicas sólidas, lo que no niega su existencia
real. Por eso, y para eso, el propio desarrollo de la técnica se basa a
veces en la racionalización a par tir de la ciencia; pero otras, en cambio,
lo tiene que hacer en el empirismo más puro y más duro. Señor Bosque
(Cartas, 8 de octu bre), hay hechos sobre la homeo patía reconocidos ya por
ejemplo por la Organización Mundial de la Salud, que el señor Avogadro, a
quien cita, no hubiera podido ex plicar. Claro que tampoco hubiera entendido
que el resultado de la medición física del paso del tiem po dependa de la
posición del aparato que lo mide. Por eso nues tra Universidad tiene la
obliga ción de no ser únicamente racio nalista, sino también empirista. Juan
Ramón Navarro Brun
Zaragoza
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HERALDO DE ARAGÓN
Sábado 10 de Octubre de 2009
24 TRIBUNA
EL MERIDIANO
Félix Romeo
MEMORIA DE AGUA
Es genial cuando alguien hace tu trabajo por ti, y en cima lo hace bien. El
jue ves, un lector de Sabiñánigo, Arturo Bosque, de 68 años, publicaba en
estas mismas páginas una carta, llena de razón, indignación e ironía, en la
que protesta ba porque el Gobierno de Aragón hubiera incluido la homeopatía
en sus consul tas sanitarias, una medida lamentable, y porque la Universidad
de Zaragoza impartiera en la carrera de Medicina la asignatura de
Homeopatía.
Se preguntaba cómo ac tuaban los 'medicamentos' homeopáticos si no tienen
una sola partícula de ele mento activo: «¿Por arte de birlibirloque? ¿Por la
magia de la memoria del agua? ¿En qué supuesta es tructura se esconde esa
supuesta memoria si el agua es simplemente H2O? ¿Con estos sortilegios nos
quiere curar el Salud?».
Me parece muy bien que cada cual gaste su dinero con quien y como quiera,
así que, aunque sea un ti mo tan grande como el de las máquinas que fabrican
billetes, no tengo nada contra quienes frecuentan las consultas
homeopáti cas... salvo si se demuestra, claro, que esa práctica da ña la
vida del cliente: allí debería actuar con con tundencia la Policía y la
autoridad judicial. " . La homeopatía es un sis tema de creencias y no una
ciencia, por ello sus supuestos beneficios no pueden ser evaluados se gún el
método científico. Es decir, en sus experi mentos no se pueden re petir
jamás los mismos re sultados, no aguantan la prueba de doble ciego, no
explican cómo el agua puede 'recordar' sus 'pro piedades curativas' y no,
por ejemplo, la mugre, las bacterias o el lindano del Gallego con los que
haya estado en contacto.
Por eso me parece fatal que con dinero público se financie esa superstición:
igual que me parecería muy mal que en las escue las se siguiera enseñando el
creacionismo o que la tierra es plana. Los siste mas de creencias tienen que
quedar fuera de todas las áreas de la Administra ción pública. A nadie se le
ocurriría que la ablación, aunque sea una práctica 'cultural' o 'religiosa'
en muchos lugares del mun do, deba incluirse en el sis tema sanitario. Lo
mismo que la 'limpieza del aura', que no se diferencia dema siado de la
homeopatía en su logorrea de energías y humores.