Sr. D. Ángel Nodal
Defensor del Espectador
Oficina del Defensor de RTVE
Madrid
Pamplona, 7 de abril de 2015
Estimado Defensor del Espectador:
Contacto con usted en representación de ARP-Sociedad para el Avance del Pensamiento Crítico, asociación sin ánimo de lucro que promueve el uso de la razón y del pensamiento crítico frente a la credulidad y las afirmaciones pseudocientíficas y paranormales.
Quiero trasladarle nuestra preocupación por los mensajes equívocos en relación con la salud que llegan a los espectadores a través de determinados programas de RTVE y que pueden inducir a graves errores a quienes se acercan a la televisión pública como fuente de conocimiento.
Son conocidos los mensajes inapropiados que se difunden en programas de gran audiencia, como La Mañana de la 1, cuya presentadora ha formulado afirmaciones temerarias y carentes de base científica en torno a la calidad de los órganos donados por un delincuente o a las propiedades curativas del aroma del limón. Más allá de las declaraciones de la señora Montero, en ese programa se difunden prácticas que oscilan entre lo dudoso y lo anticientífico, a través de su espacio “Saber Vivir”. Recibimos con frecuencia cartas de queja de personas que ven este programa y no comprenden cómo es posible que la televisión pública actúe de este modo.
Últimamente, hemos recibido comunicaciones alarmadas por otros programas, como Para Todos la 2, donde se entrevistó recientemente a Miguel Jara respecto a su controvertido libro “Vacunas, las justas”.
No deseamos plantearle a usted, como Defensor del Espectador, una crítica a las ideas sobre las vacunas transmitidas por el señor Jara. Nuestro propósito es manifestarle nuestra inquietud por la ausencia de personas expertas en estos programas que sirvan para contrarrestar desde una perspectiva científica algunas posiciones sobre medicina que no están basadas en estudios serios y rigurosos, contrastados en revistas médicas de impacto.
En España disponemos de excelentes profesionales en el mundo de la ciencia, muchos de ellos y de ellas con importantes responsabilidades en entidades de investigación. Estos especialistas pueden aportar una opinión fundamentada sobre aspectos de salud pública que, sin duda, redundará en una mejor información de las personas que ven los programas. Que se dedique tiempo y recursos a entrevistar a un periodista que es autor de un libro sobre vacunas que contiene afirmaciones que, como mínimo, son discutibles, pero que no se plantee en ese mismo programa llamar a inmunólogos expertos, es poner ante los ojos del espectador un vidrio deformante.
La televisión es un servicio público, algo aún más patente en el caso de las cadenas públicas. Nada mejor para ese servicio público que facilitar la opinión de auténticos expertos y expertas en ciencias con capacidad para la buena divulgación, para evitar que las afirmaciones temerarias y las nociones anticientíficas se instalen en la televisión que es de todos.
Por eso le pedimos que nos informe de quién o quiénes son las personas que asesoran científicamente a ese programa y nos ponga en contacto con ellas. Conocemos a muchas personas dedicadas a la investigación científica de calidad, entre los que hay comunicadores y comunicadoras muy competentes. Si es posible, pónganos también en contacto con quienes asesoran en materias científicas al programa La Mañana de La 1, para los mismos fines.
Imaginamos que un servicio público serio y comprometido con la información veraz no abordará alegremente cuestiones de salud pública tan importantes sino que contará con expertos solventes en esa materia. Queremos intercambiar puntos de vista y ofrecerles nuestra colaboración.
Le agradecemos de antemano su atención. Un cordial saludo
Atentamente
Alfonso López Borgoñoz
Presidente
ARP-Sociedad para el Avance del Pensamiento Crítico