El Escéptico Digital - Edición 2013 - Número 271
José Luis Cámara
(Noticia publicada originalmente en el Diario de Avisos)
En diciembre de 1914, el joven psicólogo alemán Wolfgang Köhler se instalaba en el Puerto de la Cruz, a donde llegó tras ser nombrado segundo director de la Estación de Antropoides de Tenerife, ubicada en la conocida como Casa Amarilla. Desde esa fecha, y hasta 1920, Köhler realizó en el centro portuense una serie de experimentos sobre la cognición de los chimpacés que constituyeron el punto de arranque de la revolucionaria Escuela de la Gestalt. Casi un siglo después de aquello, la Casa Amarilla sigue en la memoria de muchos científicos y seguidores de Köhler, que apuestan por la recuperación de una instalación que actualmente está abandonada y envuelta en una maraña legal que retrasa su rehabilitación.