1- Primeros apuntes:
Cuatro palabras sobre los "palabros"
Con frecuencia -y en parte por culpa de los mismos
que están metidos en la "transgenia"-
se utilizan vocablos que se prestan a confusión.
Como que en el tema que nos ocupa hay que hilar tan
fino como se pueda, resumo los "palabros"
que pueden resultar equívocos, explicando su
auténtico significado. (No se incluyen los
términos que irán apareciendo con frecuencia
a lo largo de los apuntes: "plásmido",
"transposón", "ssDNA y tantos
otros).
Ingeniería biológica o bioingeniería
No tiene nada que ver con la biotecnología,
ni con la manipulación genética, ni
con los genes, ni con nada que nos concierna. Se trata,
simplemente, de la/las tecnologías que permiten
obtener "recambios sintéticos" (por
decirlo de alguna manera) para un organismo, normalmente
el humano. Por ejemplo: una persona tiene hecha polvo
la válvula mitral (es la que separa la aurícula
del ventrículo izquierdos en el corazón.
La del lado derecho se llama "tricúspide").
Pues bien, un "bioingeniero" lo que hace
es diseñar y poner a punto una "mitral"
confeccionada, por ejemplo, con tejido porcino. O,
más actualmente, con algún polímero
de síntesis. Otro ejemplo: me rompo un hueso
por una parte difícil de conseguir su autosoldadura:
un "bioingeniero", aplicando "bioingeniería",
es posible que me ofrezca un "repuesto"
fabricado con una aleación de titanio, por
ejemplo.
Fecundación in vitro
Tampoco tiene nada que ver con "lo nuestro".
Son técnicas ginecológicas para lograr
embarazos en mujeres que, de manera natural, no los
conseguirían. Tanto da que se haga con esperma
(o precursores) de un donante anónimo, o del
marido, o que una sea la madre biológica y
otra la que queda embarazada, y mil y una posibilidades
más. No hay "manipulación genética"
en el sentido auténtico de la palabra.
Clonación
Esto ya nos concierne más. Se trata de conseguir
un ser con el mismo genoma (conjunto de genes, vamos:
lo que da -con muchos matices- "forma" al
individuo) que otro.
El precedente que nos viene a la memoria es casi seguro
el de la oveja Dolly, olvidándonos de que la
clonación es un mecanismo reproductivo extremadamente
frecuente en la naturaleza. Prácticamente todos
los vegetales son capaces de clonarse, algunos de
ellos -por ejemplo las fresas que ahora se está
comiendo JSE, yo no :-( ,lo hacen siempre ("estolones"
en el caso de las fresas). Por su parte, hay algunos
grupos de animales que también lo hacen: no
olvidemos a las abejas y otros himenópteros,
o a mamíferos como los conocidos comúnmente
como "armadillos".
Con todo, hay un detalle a tener en cuenta: la oveja
Dolly, y todos las terneras, ratas, sapos y lo que
queráis, que la siguieron, no son clónicos,
rigurosamente hablando. Me explico:
En una célula de animal ("célula
eucariota", aunque también se aplica a
los vegetales) no sólo se encuentra ADN (lo
más correcto, según los acuerdos internacionales
es escribir DNA. Ya lo sé, ya lo sé.....imposición
anglosajona) en el núcleo, sino también
en unos corpúsculos extranucleares llamados
mitocondrias. En la actualidad está más
que comprobado que este ADN mitocondrial ("mtADN")
no sólo controla funciones de la mitocondria
(hay muchas en cada célula), sino que también
tienen su cometido genético extra-mitocondrial.
Dos ejemplos:
La sordera familiar hereditaria: (el mejor investigador
español del tema: Xavier Estivill, Institut
de Recerca Oncològica, IRO
-Instituto de Investigación Oncológica-
en Bellvitge (Barcelona). Es un organismo público.
Teléfono: 932 607 775)
-La muerte celular programada ("apoptosis").
Por tanto, para que Dolly y homólogos fueran
realmente clones de sus "madres" deberían
también poseer este mtADN. Y, estudiando la
técnica usada en todos los casos, se puede
comprobar no es posible que lo posean. Creo que el
"distingo", sin ser trascendental, debe
tenerse en cuenta. Al menos en algún momento
que debamos ser extremadamente exactos.
Biotecnología
Aquí ya nos acercamos al mochuelo. Biotecnologia/biotecnologias
no es/son otra cosa que tecnologías que permiten
aprovechar mecanismos o reacciones de organismos inferiores
en beneficio, en principio, del hombre, aunque también
de animales o plantas. Ejemplo: un egipcio de hace
unos 6.000 años fabricando cerveza. Él
no sabia que "aquello" que obtenía
de la fermentación de malta, o maíz
u otros cereales era gracias a que en el líquido
se encontraban microorganismos (levaduras en este
caso) del grupo Saccharomyces, que posibilitaban las
reacciones químicas correspondientes. Es decir:
el egipcio estaba haciendo biotecnología sin
saber que la hacia... Y de otros ejemplos del año
del cataplún, a docenas: el pan, el yogur,
los quesos, el vino, las aceitunas (detalle curioso:
cuando tras recolectarlas se meten en agua con sal,
hierbas, etcétera, sufren la fermentación
láctea. Sí, sí: láctea....),
etcétera .
Y resulta que los años van pasando (que diría
Corín Tellado), y el ser humano piensa: ¿Como
puñetas podría hacer yo para obtener
más queso - pongamos por caso - o con mejor
sabor, o más duro, etcétera, con la
misma cantidad y calidad de leche? Y entonces va y
prueba en otros ambientes (cuevas, etcétera)
que en realidad es tanto como decir que los microorganismos
que van a actuar sobre la leche van a ser distintos,
aunque el quesero de Potes (a mi me gusta el cabrales,
qué le voy a hacer...) no sepa que está
haciendo biotecnología. Pero en un momento
dado (san Pasteur nos acoja) alguien comprueba que
si usa una bacteria (o levadura) obtiene un queso
así. Y que si usa otra bacteria lo obtiene
asá. Que si usa una tercera bacteria, tiene
más rendimiento. Y etcétera, claro.
Había nacido la biotecnología como ciencia
o tecnología reconocida, uno de los resultados
de la cual, es ese yogur que Víctor o Xan se
están zampando en esos momentos. Pero, pero.....
se preguntó el intrépido de turno. Ya
sé - se dijo - que tal microorganismo me sirve
para obtener tal alimento (o fármaco, actualmente)
y también sé que ese microorganismo
lo consigue porque elabora el enzima cual. ¿Podría
hacer yo algo - se siguió preguntando el intrépido-
para que el microorganismo en cuestión, en
lugar de fabricar tan poco enzima fabrique más
- y por tanto, obtengo yo mayor rendimiento- o bien
que fabrique el enzima "normal" más
otro que a mi me interesa?. Señores escépticos:
en este momento acababa de nacer la ingeniería
genética, o también llamada manipulación
genética. Cómo meterse en lo más
íntimo de la célula para, modificándola
en su ADN, hacerla trabajar a mi antojo...
Ingeniería genética
Poca cosa cabe decir de ella, ya que parece bastante
aclarado su origen en el párrafo anterior.
Se trata, pues, de "romper" un cromosoma
(tranquilos: ya veremos que es un cromosoma y cómo
se puede romper), y de quitarle, añadirle,
puentear, etcétera, los genes que contiene
(id que el paréntesis anterior) y ponerle otros,
o modificar los que hay, etcétera, etcétera.
Un ejemplo que va a interesar a los colisteros que
sufran diabetes insulinodependiente (es la tipo-I,
aunque también casos de tipo-II). Desde que
se supo que el déficit de insulina era la responsable
de la diabetes (actualmente hay otras líneas
de investigación sobre el tema, que no vienen
al caso) se pensó en inyectar a los diabéticos
insulina obtenida de ganado vacuno o porcino. Pero,
caramba, la insulina de vaca o de cerdo es muy parecida
a la humana, cierto; pero igual igual no es (por un
quítame allá ese aminoácido).
O sea que los diabéticos tratados con esa insulina
(mayormente porcina) tenian mayor calidad de vida,
pero no tanto como deseaban. En cambio, desde mediados/finales
de los años 80 se lo pasan bomba.... Ellos
mismos pueden inyectarse insulina rápida, otra
más retardada, otra todavía más
retardada; comer, moderamente, turrones por Navidad,
etcétera. Vamos, que se ha perdido hasta el
respeto a la diabetes. ¿A causa de qué?
Muy sencillo: a mediados de los 80 se encontró
la manera (biotecnológica, claro) de que, practicando
ingeniería genética - vamos, manipulando
genéticamente- a una bacteria tan conocida
en los laboratorios como Escherichia coli, esta -¡qué
boba!- se ponía a fabricar (en el medio adecuado,
claro) nada menos que insulina humana. ¡Exactamente
igual que la humana! Y todo porque se le había
añadido un gen "humano"...
En la actualidad, las insulinas que se comercializan
siguen obteniéndose de la E. coli y también
de las levaduras del pan, obviamente manipuladas genéticamente.
Por tanto, la ingeniería genética (manipulación
genética), en este caso anterior, ha obtenido
E. coli "transgénica" o levaduras
"transgénicas". De casos actuales,
a porrillo. Pero interesa que se sepa distinguir bien
claramente una cosa: la ingeniería/manipulación
genética es un sistema, un camino para mejorar
la biotecnología. O sea que una cosa es biotecnología
y otra ingeniería/manipulación genética.
Lo que sucede es que analfabetos y expertos están
coincidiendo en el mismo error: hablar de las dos
cosas como si fueran sinónimos, que no lo son.
Los unos porque no se enteran; los otros porque cada
día la biotecnología depende más
de la ingeniería/manipulación genética,
y entre expertos ya se entienden en su jerga habitual.
Por consiguiente, oído al parche: no son lo
mismo, aunque en muchos textos se hable indistintamente
de una u otra cosa. Y, lo peor, deberemos acostumbrarnos
a esta "confusión" porque a los propios
investigadores ya les sale así de la pluma,
y uno debe ir traduciendo mentalmente. ¡Que
tampoco es tan difícil, coñe!