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Desde el sillón Espíritus en el banquillo D el juego inocente de dos niñas, de la credulidad de las personas, y de las ansias de unos por confirmar los deseos de vida tras la muerte y de otros por hacer dinero, nace uno de los fenómenos sociales más increíbles de la historia, un fenómeno del que Hablando con fantasmas y El espiritismo ante la ciencia, libros de Miguel Ángel Sabadell y de José Comas Solá, respectivamente, aportan muchas claves. Sabadell, cuyo libro lleva el ilustrador subtítulo de Historia crítica del espiritismo y de los fenómenos paranormales, hace un repaso de los casos y sus protagonistas desde que en 1848 las hermanas Fox iniciaran el mito de la comunicación con los muertos. Tanto los médium más conocidos como los científicos e investigadores que se ocuparon de ellos aparecen en esta obra, muy bien documentada, que nos guía de forma amena y precisa entre todos estos sorprendentes acontecimientos, desde el nacimiento del espiritismo hasta aproximadamente la Segunda Guerra Mundial. Desfilan por sus páginas médiums como Daniel Home, Florence Cook, Henry Slade, Eusapia Paladino y Helena Petrovna Blavatsky. Y, además de los propios investigadores espiritistas, científicos como William Crookes, Alfred Rusell Wallace, Charles Richet y Camille Flammarion que pretendieron estudiarles con métodos no muy convenientes para estos casos y que se convirtieron en defensores o propagandistas del espiritismo, en gran medida porque en ello veían una confirmación de sus deseos, como nos hace ver una y otra vez este trabajo a lo largo de sus páginas. (Otoño 1999) Así, el químico inglés Wi- Realizó numerosas experiencias lliam Crookes, descubridor del con la médium Carmen Domíntalio o inventor del tubo de Cro- guez a petición de un círculo esokes, predecesor del tubo de ra- piritista barcelonés, que pretenyos catódicos, entre otras cosas, día de esta forma auto refrenestudió a los médiums Home y darse dado su prestigio. Lo que Cook. Y el biólogo Alfred Ru- le llevó a escribir El espiritismo sell Wallace, codescubridor de ante la ciencia -subtitulado Estula teoría de la selección natural dio crítico de la mediumnidad-, junto a Charles Darwin, más una recopilación de una serie de adelante negó que ésta también artículos publicados en 1907 en se extendiera al hombre porque, La Actualidad de Barcelona a la precisamente en ese caso, los es- que añadió un prólogo y diez expíritus serían los responsables. tensas notas. La edición ahora No deja ser asombroso que algo comentada es un facsímil de dique ahora nos parece tan esper- cha obra, editado por Alta Fupénticamente falso, que en sus lla-Mundo Científico en 1986, formas no parecen más que y cuenta con una interesante asuntos de barraca de feria, mantuviera la atención, y en última instancia la creencia en su verdad, de tantas personas, y sobre todo científicos supuestamente más preparados para examinar objetivamente los hechos, aunque como sabemos esto no supone ninguna garantía. También encontramos una mención al espiritismo en España, y en concreto al famoso astrónomo y divulgador científico catalán Josep Comas Solà (18681937), que fue director y responsable de la creación del Observatorio Fabra, y, en definiSabadell, Miguel Angel [1998]: Hablando tiva, uno de los más con fantasmas. Historia crítica del espiritismo conocidos científiy los fenómenos paranormales. Ediciones Tecos españoles de mas de Hoy. Madrid. 277 págs. principios de siglo. 60 el escéptico Desde el sillón presentación de Antoni Roca. Comas Solà no considera que el origen de estos fenómenos sean los espíritus descarnados, como pretende la doctrina espiritista, sino algunos de los fenómenos físicos poco conocidos. Hace una clasificación provisional de los fenómenos en tres categorías: ciertos, dudosos y falsos; admitiendo que en sus experiencias no ha encontrado ninguno en la primera categoría. Así, escribe en la página 76: "La primera conclusión fundamental que podemos sacar inmediatamente de estas consideraciones es que el espiritismo, tal como se concibe por sus adeptos, y considerado en conjunto, no puede de ninguna manera ser hoy aceptado por la ciencia. En otros términos; está por demostrar que los difuntos, hayan tenido jamás participación alguna en los hechos bien observados". Vemos que, a pesar ir coleccionando uno tras otro a lo largo del libro todos los fallos y fraudes tanto de la médium que él estudió como otros relativos a la metodología, por ejemplo en el caso de las investigaciones de Crookes, sigue afirmando que debe de haber un "fondo de verdad" a tenor de otras investigaciones, e incluso en la última sección aventura una explicación física mezclando lo que se llamó fuerza ecténica con algunos conceptos sobre la materia y la energía candentes en la ciencia de entonces. Es interesante comentar que, en 1890, Comas Solà comenzó la elaboración de un exhaustivo mapa de Marte culminado en 1894, labor única en España por entonces. De los famosos canales de Marte de Percival Lowell, comentaría que fueron "fruto de una ilusión subjetiva, debida a que, frente a una serie de manchas, las personas tendemos a organizarlas geométricamente". Cuando Lowell, en 1905, seguía observándolos, irónicamente uno de los más severos críticos de las ideas de éste sobre los responsables de los canales, la supuesta civilización marciana, fue Alfred Russell Wallace. Los argumentos utilizados fueron en parte científicos, pero quizás había otras motivaciones, considerando su actitud hacia el espiritismo. Con esto, se vuelve a poner en evidencia, diciéndolo jocosamente, que "no es suficiente con ser científico, hay que ser escéptico". Otra cuestión simpática es la que escribe, en tercera persona, Comas Comas Solá, Josep [1907]: El espiritismo ante la Solà en la página ciencia. Alta Fulla. Barcelona 1986. 144 págs. 99 de El espiritismo ante la ciencia : "¿Por qué no entraban ustedes, busca del truco, como cuenta los del grupo, dentro del gabi- Hablando con fantasmas . No nete oscuro con luz y sujetaban cabe duda de que, ante fenómeal fantasma? Es, en efecto, muy nos de este tipo, es decir, de racional este procedimiento, prestidigitación camuflada, los que se ha llevado a cabo en dife- magos están más capacitados rentes veces, siempre con éxito para detectarlos, como lo pone para el descubrimiento del de manifiesto también el caso de fraude, procedimiento que no Uri Geller y el ilusionista James tiene la violencia del propuesto Randi. En este contexto, está por no sé quien -creo que un bien recordar, y subrayar claramédico francés en la cuestión mente, lo que nos dice Miguel del fantasma de Villa Carmen- Ángel Sabadell: "La investigade aplicarle algunos bastonazos ción psíquica adolece hoy, como a la aparición al objeto de ver en sus primeras épocas, de proqué efecto producía la percusión blemas importantes de difícil soen ciertos individuos de ultra- lución: escasa metodología, nula tumba". base teórica, contradicción con Sin interesarse por estas in- los principios sólidamente asenvestigaciones acústicas, Hou- tados en física, química o biolodini, por ejemplo, siempre in- gía, ausencia de fenómenos netentaba demostrar el fraude tamente parapsicológicos en aceptando en lo máximo posible otra ciencia". Males no sólo del las condiciones establecidas por espiritismo, sino de toda la gama el médium, como un reto en de pseudociencias imaginables. (Otoño 1999) el escéptico 61 Desde el sillón Ambos libros terminan con una carta -en versión reducida en Hablando con fantasmas- que el doctor Jerónimo Estrany dirige a Comas Solà, quien dice tener la "verdadera satisfacción de publicarla" y en la que "resplandece noble y rigorista espíritu científico", a pesar de diferir en algunos puntos de la opinión del astrónomo; espíritu escéptico, en definitiva, y curiosa coincidencia. Dos libros recomendables, uno por exponer de forma sintética la historia y hechos en torno al espiritismo, y el otro por ser un testigo curioso y casi de coleccionista escéptico de una de las primeras posturas críticas en España. EDUARDO ZOTES SARMIENTO ¿Aristóteles estaba equivocado? D icen que el hombre se diferencia del resto de los seres vivos por ser un "animal poseedor de razón o logos". Debería deducirse de tan escueta definición que cada una de nuestras acciones personales se desarrolla conforme a un método, a un razonamiento lógico. La realidad, como todos sabemos, es muy distinta. Nadie duda de que muchos de nuestros actos no son puramente racionales: al contemplar un cuadro o una puesta de sol, tenemos emociones que no siguen las mismas pautas que utilizamos para resolver un problema matemático. Lo mismo sucede al enamorarnos o, simplemente, relacionarnos con otra persona. No obstante, muchas otras situaciones que exigen raciocinio en la toma de decisiones no suelen ser tratadas adecuadamente. Algunos ejemplos de estas situaciones son buscar trabajo, analizar el estudio publicado por un investigador, llevar la contabilidad doméstica... El resultado final puede ser un pequeño desastre en lo personal. O una catástrofe si de la gestión de una empresa multinacional o de un país se trata. En Irracionalidad. El enemigo interior, Stuart Sutherland responde a la pregunta de por qué nos equivocamos tanto al razonar y resolver problemas. A partir de datos experimentales, Sutherland va desgranando las causas de tanto despropósito en gente corriente... y profesionales del método cartesiano: médicos, ingenieros o científicos en general. Cada capítulo del libro empieza con la descripción de un motivo que puede provocar una respuesta irracional frente a un determinado problema y finaliza con una moraleja, una declaración de intenciones para no dejarnos superar por esa irracionalidad. Y todo ello con algunas gotas de ácido humor que convierten a esta pequeña obra en un manual de sano escepticismo, de pensamiento crítico. Particularmente interesante es el capítulo 22, titulado "Lo paranormal". Como dice el autor, "al igual que otras formas de irracionalidad, la creencia en lo sobrenatural no se halla limitada por clases o credos y afecta a todas las instituciones, desde las más altas hasta las más bajas". OSCAR SORIA Sutherland, Stuart [1992]: Irracionalidad. El enemigo interior. [Irrationality, the enemy within]. Trad. de Celina González. Alianza Editorial (Col. "El libro de bolsillo ", Nº 1.819). Madrid. Suscríbase a The Skeptical Inquirer La revista bismestral del Comité para la Investigación Científica de los Supuestos Hechos Paranormales (CSICOP). Un año: US$45 Dos años: US$78 Escriba a: Tres años: US$111 The Skeptical Inquirer PO Box 707 Amherst, NY 14226-0703 Estados Unidos 62 (Otoño 1999) el escéptico