Recomendamos la lectura de este artículo en formato pdf, respetando su maquetado original.
Para ello pinche en la imagen de la primera página que aparece arriba.
Para facilitar su difusión, proporcionamos también la versión del artículo en html y texto, pero tenemos que advertirle que su extracción ha sido realizada por herramientas automáticas y puede que no conserve completamente la composición original.
Texto plano (desmaquetado) del artículo : Mostrar el texto plano (segunda vez esconde)
UN MARCIANO EN MI BUZÓN
LA UFOLOGÍA Y EL COLECCIONISMO DE SELLOS (4): CINE
El primer encuentro cinematográfico entre seres humanos y habitantes de otros mundos no tuvo lugar sobre nuestro planeta, sino que fueron los terrestres los que visitaron la Luna. Se trata de la icónica película de Georges Méliès, Le Voyage dans la Lune (1902), que vemos representada en esta hojita bloque de Burkina Faso sobre la historia del cine (figura núm. 1, esquina superior izquierda). Los selenitas eran unos belicosos humanoides con pinzas de bogavantes en lugar de manos (figura núm. 2), lo que nos recuerda la famosa abducción de dos pescadores en Pascagoula (Florida) en 1973, que relanzó el fenómeno de las abducciones. Curiosamente, la primera visita extraterrestre recogida en el cine gira en torno a la idea de la procreación y la hibridación con alienígenas, tan de actualidad. En When the Man in the Moon Seeks a Wife (1908) de Percy Stow, el Hombre de la Luna llega a la Tierra en busca de bellas damiselas, peregrinación que emprenderían muchos otros alienígenas en las décadas posteriores, tanto en la ficción como en la (supuesta) realidad. Y la fama debe haberse extendido, si recordamos el título de la divertida película de 1989 protagonizada por Jeff Goldblum y Jim Carrey: Earth Girls Are Easy (Las chicas de la Tierra son fáciles). Por desgracia, la plasmación del séptimo arte en la filatelia ha sido muy reciente y centrada en la filmografía más actual, por lo que carecemos de sellos que ilustren toda Figura 2 aquella serie de películas de los años cincuenta sobre invaFigura 1 siones extraterrestres (generalmente de muy baja calidad, salvo excepciones). Sin embargo, no quiero dejar de aportar algunos datos interesantes al respecto. El primer serial centrado en la invasión de la Tierra desde el espacio fueron los quince capítulos de The Purple Monster Strikes (1945). Tras la súbita aparición de los platillos volantes en junio de 1947, no tardarían en llegar a la pantalla grande con Bruce Gentry, Daredevil of the Skies (1948) y dos años más tarde alcanzar la titularidad con The Flying
TODAS LAS IMÁGENES SON CORTESÍA DEL AUTOR
52
el escéptico
primavera 2002
Figura 3
Saucer (1950). Pero en ambos casos se trata de armas secretas terrestres, la hipótesis predominante en la época frente a los pocos que defendían la idea de visitas extraterrestres. El gran salto adelante y precursor de muchos detalles habituales en la casuística ufológica posterior, como los llamados efectos electromagnéticos y los mensajes contactistas fue Ultimátum a la Tierra (1951), cuyo título en inglés, When the Earth Stood Still que podríamos traducir por "Cuando la Tierra fue paralizada" enfatiza esos misteriosos poderes alienígenas para interrumpir el flujo de la corriente eléctrica. A ésta siguieron muchas otras que están en la mente de todos. El más reciente trabajo donde se pasa revista a todos los ovnis en el cine es The Flying Saucer Cinema, ensayo electrónico de Nigel Watson que puede adquirirse en: http://www.talkingpix.co.uk. Damos un gran salto adelante y nos plantamos en el mítico 1968 (año, entre otras cosas, de la primera gran oleada ovni en España). Dos películas marcaron aquel año: El planeta de los Simios (Planet of the Apes) al que la República Centroafricana dedicó la hojita bloque que presentamos a continuación (figura núm. 3). Basada en la novela homónima de Pierre Boulle, los supuestos extraterrestres simiescos resultan ser muy terrestres. Quizá por ello, salvo algunos casos venezolanos de criaturas peludas en 1954 y las esporádicas referencias a platillos tripulados por Bigfoots, este tipo de alienígenas no ha proliferado en el mundillo ovni. Sobre 2001: una odisea del espacio (2001: A Space Odissey) ya hablamos en la anterior entrega de esta serie, así que nos limitaremos aquí a mostrar otra hojita de la República Centroafricana (figura núm. 4) que, sobre el fondo del monolito en la órbita de Io, nos conduce a la primera película de toda una saga: La guerra de las galaxias (Star Wars) (1977).La triFigura 5 logía inicial ha merecido varias emisiones filatélicas, desde la pionera de San Vicente y Granadinas (figura núm. 5) allá por 1996, has-
Figura 4
ta las tres hojas que presentamos en estas páginas, emitidas por el país africano de Malí y dedicadas cada una
primavera 2002
el escéptico
53
Figura 6
Figura 7 Figura 8
de ellas a una de las entregas de la serie (figuras núm. 6, 7 y 8). Los alienígenas que aparecen en esta historia son abundantes y, aunque parezca increíble, algunos han llegado a burlar la vigilancia de los ufólogos que han dado por ciertos supuestos encuentros protagonizados por seres inspirados claramente en la misma. Así ocurrió con un caso denunciado por unos niños en Mallorca en julio de 1978 (poco después de que la película llegase a las carteleras españolas) (figura núm. 9) y aclarado poco después. Más problemático resulta el famoso incidente de Turís (Valencia) el 25 de julio de 1979, investigado por Ballester Olmos, quien sigue creyendo en la realidad del mismo pese a que los seres descritos por el testigo (un respetable labrador) parecen una mezcla de los jawas y los tuskens de la primera entrega (figuras núm. 10, 11 y 12). También en 1977 aparecería en las pantallas de todo el mundo la primera película moderna de ovnis asesorada nada más y nada menos que por el prestigioso ufólogo J. Allen Hynek, antiguo desmitificador a sueldo de la Fuerza Aérea americana que se convirtió en creyente: Encuentros en la tercera fase (Close Encounters of the Third Kind). Por desgracia, pese a su éxito y a su papel moldeador de la imagen de los actuales Grises, esta pe-
54
el escéptico
primavera 2002
Figura 10
Figura 11
Figura 12
lícula todavía no ha merecido ser inmortalizada en un sello. No ocurre lo mismo con la siguiente película de Steven Spielberg, E.T., el extraterrestre (E.T.) (1982) conmemorada por los propios Estados Unidos en una emisión sobre los hitos del siglo XX. Muchos críticos han señalado los paralelismos religiosos de esta película (como los de Ultimátum a la Tierra) pero su influencia en el mundillo ufológico parece haber sido mínima (figura núm. 13). En los últimos años, las películas sobre alienígenas han proliferado, siempre por delante de la casuística ufológica. Así, los primeros alienígenas reptilianos aparecen en Enemigo mío (Enemy mine) (1985) y aún más antiguos serían los insectoides, en películas como First Men in the Moon (1964) o el cortometraje de Dennis Steckler The Lemon Grove Kids Meet the Green Grasshopper and the Vampire Lady from Outer Space (Los Chicos del Limonar se enfrentan al saltamontes verde y a la mujer vampiro del espacio exterior) (1965). Todos los aspectos de la casuística ufológica se han visto reflejados, desde los platillos estrellados en El enigma de otro mundo (The Thing) (1951) hasta las abducciones con Communion (1989) y Fuego en el cielo (Fire in the Sky) (1993). La filatelia sólo ha recogido unas pocas como:
Figura 9
Independence Day (1996) con sus alienígenas provistos de trajes espaciales biológicos y esos gigantescos platillos con mortíferos rayos destructores como el que ilustra el sello emitido en 1999 por la república exsoviética de Abjasia (figura núm. 14). M.I.B. (Men in Black) (1996) con su humorística versión de los inquietantes Hombres de Negro que tanto suspense aportaron al mundillo ufológico desde que Albert K. Bender denunciase su existencia como agentes gubernamentales (más tarde metamorfoseados en aliení-
Figura 13
Figura 14
primavera 2002
el escéptico
55
UN MARCIANO EN MI BUZÓN
REFERENCIAS: "Cine y Extraterrestres" y "Ufología y ciencia-ficción" en Diccionario Temático de Ufología, Fundación Anomalía (1997). Jordi Costa, Hay algo ahí afuera: una historia del cine de ciencia-ficción Vol. 1 (1895-1959), Biblioteca Dr. Vértigo nº 9, Glénat (1997). Pedro Duque, Arañas de Marte, Biblioteca Dr. Vértigo nº 20, Glénat (1998). Martin Kottmeyer, "Bichos espaciales a boo boo" ("Space bug a boo boo") Talking Pictures, nº 15, Verano 1996.
Figura 15 Figura 16
genas) en octubre de 1953. La foto de Will Smith con un bebé alienígena en brazos ilustra uno de los sellos dedicado por la república de Tayikistán a las películas más famosas de los últimos años (figura núm. 15). También John Travolta se quiso convertir en invasor alienígena en su película Campo de batalla: la Tierra (Battlefield Earth) (2000) basada en la obra del mismo título de L. Ron Hubbard, escritor de ciencia-ficción y fundador de la Iglesia de la Cienciología (figura núm. 16). Para terminar este apresurado y excesivamente puntual paseo por el "cine de marcianos" no podemos olvidar la divertida sátira de Tim Burton Mars Attacks (1996) basada en unos cromos de los años sesenta y que ha servido para ilustrar la única tarjeta telefónica española sobre estos temas (figuras núm. 17 y 18).é
Luis R. González Manso
Figura 17
El autor desea agradecer la colaboración de Giancarlo D'Alessandro, ufólogo italiano editor del PHILCAT. Catalogo di UFOfilatelia disponible en la red: http://web.tiscalinet.it/Giada/ Asimismo, agradecería la colaboración de los lectores para ampliar la casuística filatélico-ufológica.
Figura 18
56
el escéptico
primavera 2002